LOS MISERABLES

En el puerto de Paita se ha puesto de moda la palabra MISERABLE, así, con mayúsculas y en voz alta. La gente la repite a cada rato. Es un dardo, una cachetada y un llamado a la conciencia. “Miserable”, lo dijo en voz alta el alcalde de Paita don Pedro Cuadros Alzamora, cuando un grupo de ciudadanos asistimos a una marcha en contra de su gestión, en ese momento, llena de juergas y parafernalias mientras once paiteños eran asesinados en sus narices. En aquella marcha, fueron los propios deudos los que asistieron con las fotografías de sus familiares. Marchaban los hijos, las esposas, los abuelos y hasta los vecinos. Todos indignados ante una autoridad que ignoraba lo que estaba sucediendo y prefería bailar en escenarios, contratando orquestas y demás artistas de otras provincias y hasta en su discoteca favorita llena de etiquetas azules. Sí, el jefe de seguridad Ciudadana y del COPROSEC hacía caso omiso a los reclamos de la ciudadanía que, preocupada por la situación, no le quedó otra co...